El 74% de las empresas afirma controlar el fraude de identidad, pero los ataques no dejan de crecer
## Introducción
En un contexto digital cada vez más hostil, la verificación de identidad se posiciona como uno de los pilares fundamentales de la ciberseguridad corporativa. A pesar de que el 74% de las organizaciones españolas considera tener bajo control el fraude de identidad, la realidad muestra un incremento sostenido en el número y la sofisticación de los ataques dirigidos a explotar este vector. Esta tendencia, que afecta tanto a grandes corporaciones como a pymes, pone en entredicho la eficacia de las estrategias actuales y subraya la necesidad de implementar soluciones tecnológicas avanzadas y adaptadas al cambiante panorama de amenazas.
## Contexto del Incidente o Vulnerabilidad
El auge de la digitalización, impulsado por la transformación de procesos y la adopción de soluciones en la nube, ha multiplicado los escenarios de riesgo. El fraude de identidad digital, una de las amenazas más prevalentes, ha evolucionado desde técnicas básicas de phishing hasta complejos ataques de ingeniería social y suplantación mediante deepfakes. Según datos recientes de Signicat, empresa especializada en tecnología de identidad digital, el 74% de las empresas en España confía en sus controles de identidad, pero un porcentaje creciente ha sido víctima de ataques en los últimos 12 meses.
La reciente alianza entre Servinform y Signicat responde precisamente a la urgencia de reforzar los mecanismos de verificación de identidad. Integrando tecnologías de autenticación avanzada, ambas compañías pretenden ofrecer una respuesta efectiva ante un panorama en el que el fraude digital sigue creciendo tanto en frecuencia como en impacto económico.
## Detalles Técnicos
El fraude de identidad se materializa a través de múltiples vectores de ataque. Entre los más habituales destacan el uso de credenciales robadas (técnica TA0006 según el framework MITRE ATT&CK), ataques de phishing (T1566), y la suplantación mediante documentos falsificados o manipulados digitalmente (T1110). Más recientemente, se han detectado campañas que emplean inteligencia artificial para generar deepfakes capaces de superar controles biométricos convencionales.
Las soluciones avanzadas de verificación, como las integradas por Servinform y Signicat, se apoyan en el uso de APIs de comprobación documental, biometría facial y autenticación multifactor (MFA), además de sistemas de análisis de comportamiento y machine learning para detectar patrones anómalos. Respecto a las vulnerabilidades conocidas, el CVE-2023-40042 destaca por permitir la evasión de controles de autenticación en determinados sistemas de gestión documental.
Entre los Indicadores de Compromiso (IoC) identificados en incidentes recientes se incluyen:
– Direcciones IP asociadas a proxies anónimos y redes TOR.
– Actividades de login simultáneas desde ubicaciones geográficas incompatibles.
– Intentos reiterados de acceso a cuentas mediante credenciales filtradas en brechas conocidas.
– Archivos manipulados con herramientas como Metasploit o Cobalt Strike para eludir controles de integridad.
## Impacto y Riesgos
El impacto económico del fraude de identidad se estima en más de 5.000 millones de euros anuales solo en Europa, según la Comisión Europea. Las consecuencias para las empresas incluyen desde pérdidas económicas directas hasta sanciones regulatorias por incumplimiento de normativas como el GDPR y la inminente Directiva NIS2. La filtración de datos personales y la suplantación de identidad pueden derivar en fraudes financieros, acceso no autorizado a sistemas críticos y un deterioro significativo de la confianza de clientes y socios.
Las organizaciones que sufren este tipo de incidentes tardan, de media, más de 280 días en detectarlos y resolverlos, lo que incrementa exponencialmente el daño reputacional y operativo.
## Medidas de Mitigación y Recomendaciones
Para reforzar la seguridad en los procesos de verificación de identidad, los expertos recomiendan:
– Implementar soluciones de autenticación multifactor (MFA) y biometría avanzada.
– Utilizar sistemas de verificación documental respaldados por inteligencia artificial capaz de identificar manipulaciones.
– Monitorizar e investigar de forma proactiva los IoC y patrones de comportamiento anómalos con herramientas SIEM y EDR.
– Realizar auditorías periódicas de los sistemas de identidad digital y pruebas de penetración orientadas a la suplantación.
– Ajustar las políticas de acceso en función del riesgo (Zero Trust) y mantener actualizados los sistemas frente a vulnerabilidades como CVE-2023-40042.
## Opinión de Expertos
Especialistas en ciberseguridad, como Pablo González (Pentester Lead en Telefónica Tech), advierten: “La confianza excesiva en controles tradicionales es peligrosa. Los atacantes innovan constantemente y las organizaciones deben anticiparse adaptando sus mecanismos de verificación y respuesta”. Desde Signicat, se subraya la importancia de la colaboración sectorial y la actualización tecnológica continua, especialmente ante la inminente entrada en vigor de la NIS2 en la UE, que elevará los estándares de obligación para la protección de la identidad digital.
## Implicaciones para Empresas y Usuarios
Las empresas deben asumir que el fraude de identidad no es un riesgo residual, sino una amenaza estratégica que afecta a la continuidad de negocio, la protección de la información y el cumplimiento normativo. Los usuarios, por otra parte, deben ser conscientes de la importancia de proteger sus credenciales y desconfiar de procesos de verificación poco robustos.
El mercado de la verificación de identidad digital experimenta un crecimiento anual superior al 16%, impulsado por la demanda de soluciones que combinen usabilidad y seguridad, especialmente en banca, fintech y servicios públicos.
## Conclusiones
El incremento del fraude de identidad digital pone en evidencia la necesidad de evolucionar los métodos de autenticación y verificación más allá de los controles tradicionales. La integración de tecnologías avanzadas, la monitorización proactiva y la formación continua son claves para reducir el riesgo y cumplir con las exigencias regulatorias. Las empresas que prioricen la seguridad de la identidad digital estarán mejor preparadas para enfrentar los desafíos presentes y futuros del cibercrimen.
(Fuente: www.cybersecuritynews.es)
