El 80% de las amenazas emulan tráfico legítimo: así luchan los SOCs más avanzados
Introducción
La sofisticación de las amenazas cibernéticas ha dado un salto cualitativo en los últimos años. Según recientes análisis, aproximadamente el 80% de los ciberataques actuales logran camuflarse imitando el comportamiento de usuarios legítimos, evadiendo así las defensas tradicionales y generando enormes retos para los Centros de Operaciones de Seguridad (SOC). Este fenómeno plantea preguntas cruciales: ¿cómo pueden los SOC diferenciar entre tráfico genuino y acciones maliciosas? ¿Qué medidas adicionales están adoptando cuando los firewalls y las soluciones de Endpoint Detection and Response (EDR) no son suficientes ante amenazas avanzadas, especialmente en dispositivos perimetrales y pasarelas VPN, cuyo compromiso ha pasado del 3% al 22% en los últimos ejercicios?
Contexto del Incidente o Vulnerabilidad
El auge del teletrabajo, la proliferación de dispositivos en el edge y la dependencia de sistemas VPN han transformado la superficie de ataque corporativa. Los atacantes han detectado estas oportunidades y han perfeccionado sus TTPs (Tactics, Techniques and Procedures) para explotar debilidades en el perímetro, eludiendo mecanismos de seguridad clásicos. La tendencia, confirmada por informes recientes de ENISA y el SANS Institute, señala un incremento de los ataques que emplean técnicas de Living off the Land (LotL), abusando de credenciales válidas y herramientas legítimas para moverse lateralmente y exfiltrar datos.
Detalles Técnicos
Las amenazas actuales se caracterizan por su capacidad para emular patrones de comportamiento legítimos, dificultando la detección basada en reglas o firmas. Algunas de las técnicas más empleadas, alineadas con MITRE ATT&CK, incluyen:
– Uso de credenciales robadas (T1078: Valid Accounts).
– Abuso de herramientas administrativas (T1086: PowerShell, T1059.001: Command and Scripting Interpreter).
– Movimientos laterales encubiertos mediante RDP, SMB o WinRM (T1021).
– Persistencia a través de tareas programadas o servicios legítimos (T1053, T1543).
En cuanto a IoC (Indicadores de Compromiso), los atacantes minimizan el uso de malware “exótico” y prefieren técnicas fileless, aprovechando procesos nativos para dificultar la atribución y detección. Exploits recientes han afectado a versiones concretas de VPNs como Pulse Secure (CVE-2021-22893), Fortinet FortiOS (CVE-2018-13379) y dispositivos edge de Citrix (CVE-2019-19781), todos ampliamente utilizados en infraestructuras críticas.
El uso de frameworks como Metasploit, Cobalt Strike o Mimikatz para el despliegue de payloads y la elevación de privilegios sigue siendo habitual, aunque los atacantes más avanzados recurren a variantes personalizadas para evitar la detección heurística.
Impacto y Riesgos
El impacto de estas amenazas es significativo. El compromiso de dispositivos perimetrales y VPN puede desembocar en:
– Acceso inicial a la red corporativa y escalado de privilegios.
– Persistencia prolongada (“dwell time” medio superior a 180 días en ataques dirigidos).
– Movimientos laterales invisibles para EDR/IDS convencionales.
– Exfiltración de datos sensibles, con potencial infracción del GDPR y la futura directiva NIS2.
– Pérdidas económicas directas (en 2023, el coste medio de una brecha de seguridad en Europa superó los 3,8 millones de euros, según IBM X-Force).
Medidas de Mitigación y Recomendaciones
Ante la ineficacia parcial de los controles tradicionales, los SOC líderes están adoptando enfoques avanzados:
– Implementación de soluciones de Network Detection and Response (NDR) con análisis basados en IA y aprendizaje automático para modelar el comportamiento base de usuarios y sistemas.
– Uso de UEBA (User and Entity Behavior Analytics) para identificar desviaciones sutiles respecto a patrones históricos.
– Segmentación de red y aplicación estricta de Zero Trust, restringiendo el movimiento lateral.
– Monitorización continua de logs y telemetría más allá del endpoint, incluyendo dispositivos edge y VPN.
– Simulación de ataques internos (“purple teaming”) para validar la efectividad de controles.
– Refuerzo de autenticación multifactor (MFA) y rotación frecuente de credenciales privilegiadas.
– Actualización y parcheo inmediato de dispositivos perimetrales, priorizando CVEs explotados activamente.
Opinión de Expertos
Para Pablo González, CTO de Telefónica Tech, “la clave está en ir más allá del perímetro, monitorizando la actividad en todos los activos y correlacionando eventos en tiempo real. La inteligencia artificial es un habilitador, pero requiere datos de calidad y analistas bien formados”.
Por su parte, Marta Barrio, analista senior de S21sec, alerta: “Los ataques LotL y el abuso de accesos legítimos requieren una revisión profunda de los modelos de detección y respuesta. El EDR es necesario, pero ya no suficiente”.
Implicaciones para Empresas y Usuarios
Las organizaciones deben asumir que los ataques avanzados no solo buscan vulnerabilidades técnicas, sino también errores operativos y fallos en la monitorización. Es imprescindible redefinir la gestión de identidades, segmentar los accesos y auditar de forma continua los dispositivos edge.
A nivel normativo, la inminente entrada en vigor de la directiva NIS2 endurecerá los requisitos de seguridad en sectores críticos, estableciendo obligaciones concretas en cuanto a detección, respuesta y reporte de incidentes.
Conclusiones
La emulación del tráfico legítimo por parte del 80% de las amenazas actuales obliga a los SOC a modernizar sus estrategias, adoptando tecnologías de detección basadas en comportamiento, reforzando la visibilidad y apostando por la inteligencia de amenazas. La colaboración entre tecnologías avanzadas, procesos maduros y talento especializado será la única vía para reducir el riesgo en un entorno cada vez más complejo y dinámico.
(Fuente: feeds.feedburner.com)
